Día 65. "Te amo demasiado para condenarte" Drácula de Bram Stocker (Francis Ford Coppola, 1992)

En ocasiones, la razón dice que todo está en contra, pero el corazón insiste, una y otra y otra y otra vez. Y, en ocasiones, caemos rendidos ante lo inevitable, aunque sepamos que puede hacernos daño, que puede destruirnos, que puede devorar lentamente nuestra alma. A partir de ese momento, la suerte está echada.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
y luego la suerte gira, yo estoy aquí, no estaría quizá de otra manera
4:01 p. m.
Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Día 5. "Mil fuentes". La Terminal (Steven Spielberg, 2004)

Lo que regaló Napoleón a Josefina cuando conquistó Baviera. La luz descompuesta en colores infinitos, la música del agua, el inicio de la vida. O la vida misma. A veces algo tan sencillo como el arrullo del agua hace que despierten todos los sentidos. Biktor (¿se escribirá así?) porta una promesa en una lata de cacahuetes. Un sueño. El camino fue largo, la espera, aún más. Como la vida. Las cosas suceden así. A veces merece la pena esperar y disfrutar cada minuto, aunque sea en medio de la nada o, lo que es lo mismo, en medio de la multitud que no lee, que no ve, que anda su camino sin pensar en nada más.
Leer más